Para ser un candidato adecuado para la cirugía de rinoplastia, primero debe gozar de buena salud general y haber completado el desarrollo facial. Por tanto, la rinoplastia es adecuada para pacientes mayores de 18 años. La rinoplastia también se realiza para mejorar defectos nasales congénitos o traumáticos. La rinoplastia también es una cirugía adecuada para personas que tienen dificultades respiratorias.

La rinoplastia se realiza bajo anestesia general de dos formas: abierta y cerrada. La rinoplastia abierta, que tiene un tiempo de recuperación más largo que la rinoplastia cerrada, se realiza realizando una pequeña incisión entre las fosas nasales. Generalmente se prefiere en personas con muchas deformidades. La rinoplastia cerrada es un tipo de rinoplastia en la que la incisión se realiza a través de las fosas nasales. En la rinoplastia cerrada el tiempo de recuperación es más corto y se prefiere en personas con menos deformidad.

• La rinoplastia aumenta la confianza en sí misma de una persona.

• Las deformidades congénitas o relacionadas con traumatismos mejoran gradualmente y se logra una apariencia estética de la nariz.

• Los problemas respiratorios provocados por las deformidades desaparecen.

• La rinoplastia también ayuda a eliminar el problema de los ronquidos que experimenta una persona mientras duerme.

Después de la cirugía de rinoplastia, los pacientes permanecen en el hospital una noche. El médico coloca una férula en la nariz como soporte. Puede aparecer hinchazón y hematomas después de la rinoplastia. Se debe evitar el contacto con la nariz después de la cirugía. Se debe esperar la aprobación del médico para volver a las rutinas y ejercicios diarios.